La BSL son las siglas de la Black Star Line, la primera compañía naviera de la comunidad negra. Antes de profundizar en esta compañía naviera, contestaremos a la pregunta que todo el mundo se hizo. ¿Por qué eran tan caros los barcos comprados por la BSL? Muy sencillo, por las siguientes cuatro razones fundamentales:
- Le economía y política blancas no querían una economía negra paralela que socavara sus beneficios. Una BSL poderosa implicaba una UNIA (Universal Negro Improvement Association) poderosa, que a su vez significaba una raza negra poderosa.
- La población negra seguía siendo desde el punto de vista humano, un grupo de segundo orden.
- El ansia por formar una flota naviera hacía crecer la necesidad de compra, lo cual era una debilidad aprovechada por la oferta de mercado.
- El origen del dinero destinado a la compra de buques provenía de toda la comunidad negra.
Black Star Line de Marcus Garvey
Un mensaje importante había calado hondo en la comunidad negra. Llevar a cabo el sueño panafricano, el regreso a África (Zion) de toda la población negra. Y esta posibilidad, antaño sueño y ahora realidad, es la que obligaba a realizar movimientos tangibles que pusieran de manifiesto dicha oportunidad.
Había, por tanto, que formar una flota rápidamente y realizar viajes que dieran cumplimiento a las promesas realizadas.
En este contexto, las premisas “c” y “d” fueron aprovechadas por los armadores de la época como una oportunidad de negocio. A la BSL solo se le ofrecían como posibilidades de compra verdaderos “candrays”. La BSL solo podía poner el ojo en bañeras flotantes, además, una vez mostrada inclinación por alguna de ellas, su precio de venta subía exponencialmente.
La falta de profesionalidad y honestidad de responsables organizacionales unido a la inexperiencia náutica de Marcus. En algunas ocasiones, algunos de los capitanes de la BSL fueron sobornados por los armadores de los buques en venta. Dichos capitanes hicieron de consejeros recomendando la compra de estos buques desastrosos.
Como consecuencia, los barcos comprados por la BSL eran navíos en muy mal estado que necesitaban de obras importantes de ingeniería naval para hacerlos navegables.
El nombre del capitán Joshua Cockbourne aparece en diferentes informaciones como alguien que habría cobrado comisiones por aconsejar erróneamente a Marcus y provocar dispendios en las compras de barcos. La gran pregunta era ¿Cockbourne formaba parte del personal introducido en la BSL para hundir a Marcus?
The Yarmouth el Primer Navío de la Black Star Line
The Yarmouth era un buque algodonero que durante la primera guerra mundial también realizó algún transporte de carbón. Este fue el primer barco de la BSL y también su primer fiasco, ya que se compró a la North American Steamship Corporation por 168.500 $. El armador de dicho buque era W. L. Harriss. La BSL no disponía de dicha cantidad, por lo que se fue pagando a plazos. Sin embargo se hizo un arreglo extraño ya que la propiedad del buque seguía siendo de su armador Harriss pero la explotación comercial pasaba a manos de la BSL. A nuestro juicio se hizo un contrato mercantil de explotación sin más, es decir la naviera que explotaba comercialmente el barco era la BSL pero el propietario era su armador W. L. Harriss (North American Steamship Corporation). Entendemos también que habrían estipulado unos plazos de pago de deuda para que la propiedad del buque fuera finalmente transferida a la BSL. Debido al desconocimiento náutico, surgió otro problema importante, la BSL estaba teniendo problemas para conseguir un seguro adecuado para The Yarmouth y tenía que realizar su primer contrato de transporte a Las Antillas. El armador Harriss no permitía que zarpara hasta que el seguro se realizara legalmente.
Sabotaje en la Primera Travesía del Yarmouth
Cuando por fin llegó el día señalado, se preparó una gran fiesta con banda de música incluida. Miles de personas acudieron a ver zarpar el barco, algunos hasta pagaron 1 dólar por subir a bordo. Leo Healy, en representación del armador Harriss, apareció en escena para truncar el día más importante en la historia del comercio de la raza negra. Quería prohibir que el barco zarpara porque seguía sin tener el seguro adecuado para navegar.
Sin embargo, la cantidad de gente allí presente podía significar un serio problema. La frustración de no ver zarpar el barco podía ser interpretado como usurpación, sabotaje e insulto, lo cual supondría un disturbio de dimensiones y consecuencias impredecibles. Por dicho motivo, Healy aceptó de mala gana que el buque zarpara pero puso como condición que tanto él mismo como el capitán de puerto, de raza blanca, debían viajar a bordo.
Esto en realidad fue una treta por parte de Healy, ya que nada más atracar el buque en la orilla opuesta del río Hudson, no permitió que The Yarmouth continuara la travesía hasta tener el seguro en regla. Obviamente aquí ya no había una gran masa de gente negra. Sin embargo, no consiguió el efecto que se pretendía porque este hito histórico alcanzado por Marcus supuso un pico en la venta de acciones de las empresas de UNIA. Cuentan los historiadores más afines, que Marcus había influido ya en la mentalidad de la comunidad negra hasta el punto de que a la gente no le importaba pasar más necesidades por el hecho de gastar su dinero en acciones de las compañías de UNIA. Marcus había cambiado sus prioridades. Ahora el progreso de la raza negra ocupaba el lugar más importante.
Este buque siempre estaba averiado. Era presa de continuos sabotajes por parte de la tripulación. Solo daría tres viajes, con lo que casi no hubo retorno de la inversión y supuso grandes pérdidas económicas.
Shady Side Segundo Buque de la Black Star Line
El Shady Side fue otra pésima adquisición de la naviera. El armador del buque convence a Marcus de que este ferry que se había estado usando en el río Hudson sería una buena inversión. Marcus creyó que este buque iba a reportar beneficios a la compañía. Con las continuas averías del Yarmouth, Marcus necesitaba ingresar dinero en las arcas.
La vida náutica de este navío fue realmente efímera. Se compró en verano de 1920 y se hundió en el invierno de ese mismo año. El motivo fue una vía de agua durante una tormenta de nieve. Fue abandonado en el río Hudson en la zona de las marismas de Fort Lee en el estado de New Jersey. El barco nunca se intentó reflotar o reparar ya que la BSL quebró poco después.
Kanawha otro Buque para la Black Star Line
Kanawha fue el tercer barco adquirido por la BSL. Siempre estaba averiado a causa de incidencias mecánicas provocadas por la propia tripulación. El sabotaje fue una lacra de la que nunca se libraría Marcus Mosiah Garvey. Sin embargo, en este caso este tipo de actos acabaron con la vida de un marinero. Uno de los sabotajes propició la explosión de una caldera, llevándose por delante la vida de una persona.
Orion el Último Barco de la Black Star Line
Con el barco Orion se realizaron una serie de operaciones irregulares y oscuras. Este barco pertenecía a la naviera United States Shipping Board (USSB) y lo subastaba para vender al mejor postor. Partimos del mismo prejuicio, es decir, la compañía vendedora prefiere que su buque pase a manos de otra naviera gestionada por blancos, a la vez que encarecerá el precio del barco todo lo posible porque las arcas de las empresas de la UNIA, BSL incluida, se nutren de toda la comunidad negra.
El agente negociador por parte de la BSL fue un abogado llamado Silverston, que inicialmente mostró interés por el barco en cuestión. Es importante saber que Silverston fue elegido por Noah D. Thompson para dicha operación, y éste era el presidente de la filial de UNIA en Los Ángeles. La compañía USSB aumentó el precio del barco a 225.000 $, cantidad desorbitada e imposible de asumir por la BSL.
Sorprendentemente, en agosto el barco parecía haber sido adquirido por Silverston en representación de la BSL y por la mencionbada cifra. La BSL debía entregar un anticipo de 25.000 $ a la USSB más una especie de financiación de crédito para el pago de la restante cantidad.
La cuestión es que del dinero entregado a Silverston para pagar el anticipo quedó reducido casi a la mitad por los excesivos gastos de éste. Además, parece que Thompson había entregado otros 16.000 $ como depósito sin contar con el visto bueno de nadie de la BSL. El caso es que desde la USSB se negaban estas entregas y no había ningún tipo de constancia escrita de las mismas. Esto provocó una gran decepción en Marcus Mosiah Garvey, lo que contrarío a Thompson.
Noah D. Thompson comenzó, desde Los Ángeles, a hacer una campaña interna de descrédito, recriminando a Marcus que nunca los hacía partícipes de los éxitos ni les enseñaba los buques que la compañía adquiría.
La filial de UNIA en los Ángeles solicitó la presencia de Marcus para que diera explicaciones, pero éste envió a alguien llamado E. L. Gaines en su lugar. Esto fue tomado como ofensa y provocó la salida de la UNIA por parte de Thompson y de muchos de sus seguidores, produciéndose otra escisión en la organización.
Aquí empezó el declive del proyecto panafricano y de Marcus Garvey. Más gente de color con buen estatus social aprovecharon para atacar este proyecto. William E. B. Du Bois tildó a Marcus de fraudulento y temerario. Tiempo atrás Marcus se había opuesto a la estrategia integracionista de Du Bois quien reclamaba el gobierno para los africanos a través de la igualdad racial, mientras que Marcus creía que la liberación solo llegaría inicialmente por el separatismo racial, ya que solo serían respetados cuando la economía negra fuera poderosa.
Esto junto con las ganas del FBI por terminar con Marcus, resultó en su acusación y encarcelamiento. En febrero de 1922 con la acusación de fraude cometido por Marcus, la BSL cesó su actividad y la naviera se fue a pique.
Black Cross Navigation and Trading Company
El espíritu emprendedor de Garvey y su actitud perseverante hicieron acto de presencia una vez más. Mientras intentaban quitarle la BSL, durante el proceso judicial, él creó otra compañía naviera, la Black Cross Navigation and Trading Company. Realizó llamamientos a la población negra para que compraran acciones y poder llevar a cabo la compra del primer barco para esta compañía.
Ahora el propósito se dejaba mostrar en toda su amplitud. Se pedía a la población negra que invirtiera en la compañía para poder comprar barcos, no solo con el fin de transportar personas de a África, sino materias primas del continente africano al resto de países donde había población negra con fábricas y empresas gestionadas por gente de color. Posteriormente los productos manufacturados finales serían comercializados. Esto generaría una economía futura impredecible. Ya no se trataba de empresas gestionadas por población de color, sino que se procuraba emplear todos los recursos que potenciaran la economía negra, para transformarlos en nuevos recursos que satisficieran las necesidades de cualquier consumidor, incluidos por supuesto los consumidores negros.
Ahora no se hablaba de comprar algún barco, sino docenas de buques que permitieran transportes de mercancías en cantidades superlativas. Se pretendía con ello tapar el fiasco de la BSL con una nueva empresa naviera más potente. Había que devolver la esperanza y la ilusión a la comunidad negra.
Se estaba hablando de lanzarse a la conquista comercial del mundo en igualdad de condiciones que la economía blanca. De nuevo la economía negra trataba de tú a tú a la economía blanca.
Se hizo un llamamiento para que cada ciudadano negro prestara la cantidad que pudiera. Las cantidades preestablecidas fueron: $25, $50, $100, $200, $300, $400, $500, $600, $700, $800, $900 o $1,000. Ahora el enfrentamiento era más frontal que nunca. Se acusaba al poder blanco de la destrucción de la BSL y deterioro de UNIA. Esto fue aprovechado en el llamamiento para que la comunidad negra viera en estos préstamos a la Black Cross Navigation como el modo de vencer al enemigo blanco.